Tanto las cámaras un poco buenas, como cualquier programa de edición fotográfica, permite pasar una foto en color a blanco y negro. Pero nunca al revés, claro, si la foto de partida está realizada sin color.
Ya os digo que el blanco y negro es el rey de las fotografías que tienen contraste. Allá donde percibáis luces y sombras intensas, atacar la foto en ambas opciones, y veréis como la desarrollada en grises tiene algo especial que nos acerca a la historia de la fotografía. Si tan solo la hacéis en color, probar a quitarle sus colores en Picasa o photoshop o lo que tengáis a mano. En general, acentuarles el contraste. Es lo que hice en estos ejemplos reflejados aquí arriba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario